La exvicepresidenta de la Eurocámara Eva Kaili, detenida y destituida a raíz del estallido de la presunta trama de sobornos conocida como Qatargate, ha confesado que conocía la existencia de este entramado de pagos en el que también estarían implicados su pareja, Francesco Giorgi, su padre, Alexandros Kaili, y el exeurodiputado italiano Antonio Panzeri, considerado el líder de la trama. Según han publicado los diarios Le Soir y La Reppublica, la eurodiputada ha admitido ante el juez la implicación del resto de personas investigadas.
«Es cierto que conocía las actividades del señor Panzeri y sabía que había maletas llenas de dinero en mi casa», ha declarado Kaili, quien también ha confesado haber pedido a su padre que escondiera parte del efectivo que guardaba en su domicilio. De hecho, el padre de la ya exvicepresidenta de la Eurocámara fue detenido el pasado 10 de diciembre, cuando se marchaba de un hotel con una maleta llena de dinero.
Según los medios citados, la eurodiputada trató de manipular las pruebas avisando a otros implicados como su padre y Panzeri sobre la investigación. El próximo jueves 22 de diciembre Kaili comparecerá en audiencia ante la Cámara del Consejo, cuyo presidente decidirá si la mantiene en prisión preventiva o la deja en libertad provisional.
