Jordi Puigneró, el actual vicepresidente de la Generalitat, se reunió con miembros del Shin Bet y del Mossad, agencias de inteligencia de Israel, gracias a la conexión que le facilitó Víctor Terradellas, exresponsable de relaciones internacionales de Convergència, revela El Confidencial.
Según esta información, Terradellas logró que Puigneró fuera recibido y quedó constancia de ello en un mensaje enviado el 27 de febrero de 2018 por el exresponsable de relaciones internacionales de Convergència al expresidente catalán Carles Puigdemont, si bien la fecha concreta del encuentro no consta.
Terradellas comunicó a Puigdemont que había atado una visita de Puigneró con «la inteligencia interior israelí», que sería el Shin Bet, y que estaba preparando «un nuevo encuentro con los servicios de inteligencia exteriores israelíes», el Mossad .
Puigneró era entonces secretario de Telecomunicaciones, Ciberseguridad y Sociedad Digital de la Generalitat, y tres meses después se convirtió en consejero de Políticas Digitales y Administración Pública del gobierno presidido por Quim Torra. El Confidencial asegura que Puigneró comunicó a sus interlocutores en Israel una intención de comprar material de espionaje por un importe de 27 millones de euros -que sería rebajado a 23,5 millones-, para lo que preveía un envío desde París por carretera que evitara el control de las autoridades españolas.
En concreto, fuentes citadas por el mismo digital indican que Puigneró, gracias a Terradellas, fue recibido por Erez Kreiner, exresponsable de ciberseguridad israelí y miembro del Shin Bet, y que el actual vicepresidente catalán asistió a más reuniones en Tel-Aviv, una de ellas con Leo Gleser, exmiembro de élite de Mossad dedicado al sector de la seguridad privada. Xavier Gatius, director del Cesicat, e Iván Monforte, jefe de gabinete de Puigneró, le compañaron
El Confidencial, además, asegura que Terradellas, en las semanas posteriores a esta comunicación con Puigdemont, conversó con frecuencia con un rabino de Barcelona para concertar una reunión con alguien que debía llegar a la capital catalana, y con León Amiras, vicepresidente del Colegio de Abogados de Jerusalén y presidente de OLEI, una organización de inmigrantes de América Latina, España y Portugal en Israel, quien le comunicó sobre el caso catalán, según la misma información, que “el mundo empezar a comprender el derecho a la independencia de los pueblos”.
