La celebración de la 59ª edición de la Fira de l’Oli de les Borges Blanques, el pasado fin de semana, ha vuelto a poner de manifiesto la discordia entre los dos socios del gobierno catalán, ERC y Junts, esta vez con la presencia de representantes institucionales en el evento como detonante.
Según publica Nació Digital, el Ayuntamiento de Les Borges Blanques, el único de la zona de Ponent gobernado por Junts, ha reconocido que declinó la posibilidad de que asistiera el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, aduciendo que Presidencia no aceptó el encaje en los actos oficiales propuesto por la dirección de la Fira, que afirma quería marcar un “acento feminista” y que ya habían estructurado la agenda de la inauguración.
Ni la inauguración ni la clausura, reservadas para representantes de Junts, formaban parte de la propuesta trasladada a Presidencia. Tampoco ninguna de las dos consejerías relacionadas temáticamente con la feria, las de Agricultura y Empresa, controladas por ERC, enviaron a sus respectivos consejeros.
De hecho, la misma información especifica, citando fuentes del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, que la consejera Teresa Jordà recibió una invitación para asistir, pero la rechazó porque no podía inaugurar o clausurar la feria, y su intervención se limitaba a una entrega de premios, un papel que las mismas fuentes consideran un menosprecio.
A diferencia de ERC, que fue representada a título personal por el consejero Roger Torrent, acompañado de otros miembros del partido, Junts aportó la mayoría de representantes institucionales de la Generalitat, ya que asistieron los consejeros Jaume Giró, Lourdes Ciuró y Violant Cervera, que participó en la inauguración del pasado viernes. Asimismo, la presidenta del Parlamento de Cataluña, Laura Borràs, presidió una entrega de premios y difundió ampliamente su presencia en las redes sociales.
Mientras el gobierno municipal de Les Borges Blanques asegura que quiere evitar una polémica política, que considera que no beneficia a nadie, ERC prevé llevar el desequilibrio de la representación institucional al pleno municipal, añade también Nació Digital.
