La decisión del tribunal belga contraria a la extradición del rapero Valtonyc a España ha tenido como consecuencia un nuevo rifirrafe entre sectores vinculados a Junts y Carles Puigdemont y dirigentes o partidarios de ERC. En este caso, la chispa que ha encendido el fuego de la discordia entre unos y otros lo ha puesto el director de la Escuela de Administración Pública de Cataluña, Ismael Peña-López, con un mensaje en Twitter que borró ante el alud de críticas e insultos que recibió pero que después recuperó para justificarlo. Entre los primeros en protestar por su mensaje estuvo el cantante y dirigente del Consell por la República, Lluís Llach.
Ismael López Peña se hizo popular a raíz de su intervención en la organización de las elecciones del pasado 14 de febrero como director general de Participación Ciudadana. Su gestión fue acertada y después de las elecciones fue nombrado director de la Escuela de Administración Pública de la Generalitat, que depende del presidente Pere Aragonès. Tras la negativa de la justicia belga a extraditar a Valtonyc, publicó este mensaje en Twitter: “No creo que la libertad de expresión tenga que amparar a Valtonyc. Al igual que dudo que pueda equipararse a terrorismo. Ni blanco ni negro”.
Lluís Llach contestó a Peña-López con otro tuit: “Caramba Ismael. Es difícil, por no decir imposible, justificar lo que dices desde cualquier punto de vista democrático”. El director de la Escuela de Administración Pública le replicó recuperando el tuit que había borrado y diciendo: “Eso es lo que he dicho. Juzga por ti mismo. Estamos frivolizando con etapas que teníamos superadas, aquí y en el País Vasco. No hay que ir a la cárcel por eso, ¿pero criticarlo? Sólo faltaría”. Y añadió una serie de comentarios críticos con textos de las canciones de Valtonyc: “Ni bombas ni disparos contra nadie. No va de insultos al rey, sino jugar con la línea borrosa entre las amenazas de muerte y las metáforas. Yo lo encuentro censurable. Mucho”, “A mí esto me parece una abominación. No creo que sea legítimo pedir ir matando a gente. No es terrorismo, ni mucho menos. Pero no creo que la libertad de expresión pueda amparar pedir explícitamente la muerte de nadie”, “No podemos aplaudir las políticas de otros países de cero tolerancia contra el extremismo y hacernos los tibios ante quienes piden para unos políticos que les peguen un tiro o pongan una bomba. No podemos” o dar por bueno que “un disparo a la frente de tu jefe está justificado”.
Llach no volvió a intervenir en el debate pese a las explicaciones de Peña-López pero sí que lo hicieron cientos de tuiteros seguidores suyos, muchos de los cuales aprovecharon para acusar a ERC de venderse al gobierno socialista y traicionar a Catalunya. Algunos, como David Romà, acusaron a los dirigentes de este partido de no alegrarse de la sentencia de la justicia belga: “24 horas ya y Rufián, Junqueras, Aragonès, Tardà, Forcadell, Cuixart y Romeva siguen sin hacer un solo tuit felicitando a @valtonyc, esto ya no es ser cobarde o botifler, esto es ser ruines y miserables”.
