Carles Puigdemont pone a Vicent Sanchis en el punto de mira

JxCat decide amargar al director de TV3 su final de etapa al frente de la televisión pública acusándole de favorecer a ERC y de provocar una desorientación general con su gestión

Vicent Sanchis fue colocado como director de TV3 en 2017 por decisión de Artur Mas, entonces presidente de la Generalitat y del Partit Demòcrata Europeu Català (PDeCAT). La confianza de JxCat, la organización sucesora del PDeCAT, se ha desvanecido y ahora su presidente, Carles Puigdemont, hace todo lo posible para desacreditar a Sanchis. Ha lanzado a sus personas de confianza y a sus representantes en el Parlament contra él y le está amargando el final del mandato como director de TV3 con críticas constantes a su gestión, tanto en las redes sociales como en sede parlamentaria.

El más persistente de los inquisidores de Vicent Sanchis en el núcleo duro de Puigdemont es el director de su Oficina como expresidente de la Generalitat, Josep Lluís Alay. Desde hace meses se queja insistentemente de TV3, a la que acusa de haberse españolizado y de maltratar a su jefe y su partido en beneficio de Esquerra Republicana. La última queja de Alay contra la televisión pública de la Generalitat, en Twitter como la mayoría de sus críticas, ha sido porque no pidió perdón por difundir la información que le implicaba en una trama misteriosa relacionada con el espionaje ruso y que habría pretendido conseguir que Rusia apoyara la reivindicación independentista en Catalunya. Los medios de comunicación favorables a Puigdemont difundieron que la Unión Europea había desmentido ese vínculo, aunque no era verdad. Y Alay quería que TV3 actuara como esos medios.

El director de la Oficina de Puigdemont también ha acusado a TV3, en los últimos meses, de difundir un publirreportaje de la Guardia Civil, de interesarse demasiado por los deportistas españoles que participan en competiciones internacionales, por el volcán de lava de la isla canaria de Palma o por la lotería nacional española. Incluso, se ha atrevido a reclamar a TV3 que reabra la delegación de la Catalunya Nord, en Perpiñán, cerrada en 2013. El ex-consejero de Cultura, Lluís Puig, que huyó y vive en Bélgica cómo Puigdemont se ha sumado a las quejas de Alay por lo que consideran una excesiva atención de TV3 al volcán de Palma preguntándose en un tuit si el interés respecto a esta catástrofe “¿es porque pertenece al continente africano o por su españolidad?”.

Otro de los políticos de JxCat que fiscalizan a TV3 es el diputado Francesc de Dalmases, mano derecha de la presidenta del Parlament y última candidata de este partido a la presidencia de la Generalitat, Laura Borràs. A menudo denuncia en las redes algunas informaciones de los telenotícies que le soliviantan. Ha llegado a conseguir que el de la noche, que dirige y presenta a Toni Cruanyes, cambiase una información del del mediodía después de una queja de Dalmases. El diputado se había quejado de que en un reportaje sobre el cuarenta aniversario del Parlament de Catalunya no se hubiera mencionado la condena a prisión de su ex-presidenta Carme Forcadell. Por la noche, esa mención se hizo y Dalmases lo agradeció.

La crítica más abierta y clara desde JxCat a Vicent Sanchis la hizo, el pasado 26 de noviembre, el portavoz parlamentario de este partido en la Comisión de Control de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), Josep Riera. Su ataque fue rotundo y sorprendió incluso a los portavoces de la oposición, que estaban más acostumbrados a ver los masajes amables de los diputados de JxCat a la gestión de TV3. Riera repasó los programas que a su entender van mal: “De Germans ya hablamos, que no ha funcionado; Labanda sonora, por ejemplo, no ha arrancado y ha terminado cambiando de horario; L’última nit del karaoke, de poco a menos; Persona infiltrada no despunta, e incluso un clásico como el APM ha tenido algunos registros a la baja que no habíamos visto antes. Sobre programas diarios de peso importantes también nos preocupa que el Planta baixa, lejos de consolidarse, ha tenido caídas preocupantes de audiencia, paralelamente a una cierta desorientación en los planteamientos. También el Tot es mou ha tenido descensos y desorientaciones que también nos preocupan. Y el FAQS –el FAQS quizá merecería una pregunta sola–, está instalado en una media ya por debajo de la media de la cadena, muy baja”.

Riera acabó su intervención diciéndole a Sanchis: «Queremos preguntarle hasta qué punto le preocupan todos estos síntomas, hasta qué punto son cuestiones puntuales o todo ello responde a una desorientación más general o a otras causas». La respuesta del director de TV3 fue: “¿Desorientados? Reorientados, continuamente, o reorientado continuamente”. JxCat considera que Sanchis se ha reorientado de JxCat hacia ERC y por eso le hará la vida imposible en los últimos meses de su mandato.

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