Este miércoles ha tenido lugar en el Ayuntamiento de Barcelona el pleno extraordinario que ERC y JxCat han forzado para reprobar y pedir explicaciones al Gobierno municipal sobre los macrobotellones y disturbios de las fiestas de la Mercè. La iniciativa, sin embargo, sólo ha contado con el apoyo de los partidos independentistas, y tanto la alcaldesa, Ada Colau, como los tenientes de alcaldía Jaume Collboni, Albert Batlle y Jordi Martí Grau se han salvado de la reprobación gracias a la abstención del PP, Cs y Barcelona pel Canvi.
Aunque estos tres partidos también han criticado el dispositivo que el Ayuntamiento había preparado para hacer frente a las noches de la Mercè, se han desmarcado de reprobar al gobierno de Colau y Collboni porque consideran que ERC y Junts, como formaciones que integran el Gobierno de la Generalitat, también son responsables de lo que ocurrió. De hecho, en sus intervenciones, Luz Guilarte (Cs), Josep Bou (PP) y Eva Parera (Barcelona pel Canvi) han acusado a los partidos independentistas de omitir responsabilidades.
Guilarte ha asegurado que tras la convocatoria del pleno hay motivos «tacticistas» y «electoralistas» de ERC y JxCat, mientras que Bou ha afirmado que «son tan responsables como el gobierno municipal». Parera, por su parte, ha criticado que «todo el mundo se haya querido sacudir las responsabilidades», y ha asegurado que los grupos independentistas son «los responsables de la mayor violencia en democracia el Parlamento» debido a la «pedagogía de la desobediencia» que han hecho en relación al ‘procés’.
