Esta próxima medianoche decaerá el estado de alarma y con él se irán algunas de las restricciones más importantes, como el toque de queda o el confinamiento perimetral. Este sábado por la noche el toque de queda estará vigente durante dos horas: de 10 a 12. A partir de entonces, y por primera vez en seis meses, se podrá salir a la calle de noche. Eso sí, seguirá estando prohibido encontrarse con más de seis personas.
Previendo que mucha gente va a salir a la calle para celebrar el fin del toque de queda, los Mossos y las policías locales han preparado un despliegue policial similar al de una noche de San Juan o de Fin Año.
El consejero de Interior, Miguel Sàmper, ha hecho «un llamamiento a la prudencia y a la responsabilidad» y ha pedido a la ciudadanía que salga a la calle con conocimiento y respetando las restricciones: principalmente la limitación de encuentros a seis personas y la prohibición de beber alcohol en la calle (esto con pandemia o sin).
El comisario portavoz de los Mossos, Joan Carles Molinero, ha dado más detalles sobre el dispositivo especial de esta noche, con controles de tráfico y alcoholemia en todo el territorio. «Será un dispositivo muy similar al de una verbena de San Juan o de Fin de Año. Hay que buscar los puntos más estratégicos para la movilidad no será la misma», ha dicho. Serán operativos conjuntos con las policías locales. De hecho, en Barcelona, la Guardia Urbana incrementará un 30% sus efectivos.
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña avalaba ayer las restricciones que le ha planteado el Govern para después del estado de alarma. La de los encuentros de seis personas y la de los aforos religiosos son las dos restricciones que necesitaban aval judicial porque afectan derechos fundamentales. También se mantienen, como mínimo una semana más, otras restricciones como el límite de aforo en tiendas, teatros y cines: a un tercio.
