Catalunya en Comú, el partido de Ada Colau y Jèssica Albiach, ha estado mirando desde la distancia el movimiento del secretario general de Podemos y vicepresidente segundo del Gobierno Español, Pablo Iglesias. Desde la distancia y con cierta desconfianza. Y es que Catalunya en Comú ha sido el eje central de los comunes, con un Podemos y un sector comunista minimizados, y se ha aprovechado todos estos años del liderazgo de Iglesias para mantener la hegemonía dentro del espacio.
Ninguna decisión de las que se han tomado ha chocado con Podemos, y cuando ha pasado, el partido de Iglesias en Cataluña ha dado un paso atrás y se ha tragado los sapos que hayan hecho falta para mantener la paz interna y Ada Colau tranquila. Ahora que marcha Iglesias, sin embargo, se extiende la preocupación por si eso podría cambiar.
