David Madí y Xavier Vendrell manifestaron a Víctor Tarradellas su desconfianza sobre la supuesta intención del gobierno ruso, que les había trasladado el propio Terradellas, de ayudar con el envío de 10.000 soldados, la asunción de la deuda y la inversión de 100 a 300 millones de euros en "temas de comunicación" en Cataluña si se declaraba la independencia en 2017, según las conversaciones telefónicas intervenidas durante la investigación sobre el presunto desvío de fondos a la estructura montada por Carles Puigdemont en Bélgica y reflejadas en el sumario judicial, publica La Vanguardia.
Estas supuestas intenciones rusas no convencieron a estos dos miembros del llamado Estado mayor del procés. Según la misma información, Madí respondió que "es probable que todo esto sea una tomadura de pelo" y que "lo único que puede pasar es que no sea verdad y que sea una operación del CNI". "¿Qué posibilitados crees que hay que todo esto sea una fantasmada", le preguntó Vendrell, por su parte.
Terradellas les aseguró que su contacto con Rusia ofreció al entonces presidente catalán, Carles Puigdemont, "10.000 soldados aquí" y que el ofrecimiento procedía "del jefe de arriba del todo", pero que el presidente de la Generalitat "se cagó a las bragas". "Te pido que la conversación no salga de aquí", añadió Terradellas, que también aportó una fecha, el 24 de octubre de 2017, en la que asegura que "hizo venir al jefe de Rusia y pagaban toda la deuda".
"¿Cómo entrarían 10.000 tíos aquí?", le preguntó Vendrell. Y Terradellas le respondió que hace falta infraestructura y control del aeropuerto. En la conversación también surgió la pregunta de qué haría la OTAN si Rusia desplegara tropas en Cataluña. Vendrell, según La Vanguardia, se ofreció a acompañar a Terradellas a Rusia dos días antes del 1-O, pero Terradellas fue solo y Vendrell le advirtió que sus interlocutores podrían ser "el Estado soviético o una trampa".
Terradellas, que era secretario de relaciones internacionales de CDC y presidente de la Fundación CATmón, dijo en una de las conversaciones intervenidas sobre las tropas rusas que "siempre he dicho que no las quiero", al igual que asegura que tampoco Puigdemont, de quien dice que manifestó que "no quiero ser responsable de que nos maten gente". Terradellas, eso sí, dijo que "se necesitan 100 muertos" y que era partidario de meter a "un millón de personas a la plaza de Sant Jaume, en la plaza de Cataluña hasta Colón", de manera que "tendrán que matar para entrar". Pero para Vendrell era "demasiado tarde. Se nos ha pasado el arroz".
Maria Zajárova, la portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, desacreditó la semana pasada las palabras de Víctor Terradellas cuando señaló que "se basan en el testimonio de representantes de las fuerzas separatistas. Y entendemos que esta gente es capaz de hacer las declaraciones más increíbles y aventureras con el objetivo de internacionalizar el proceso".
Por su parte, otro de los miembros del Estado mayor del procés investigado y detenido en el marco del mismo caso, Oriol Soler, ha ubicado al exdirigente convergente, durante una entrevista en el programa Preguntes freqüents de TV3 en el sector del independentismo que "tiene tendencia a hacer el ridículo", y lo trató de "friki".
