El vicepresidente del Govern con funciones de presidente, Pere Aragonès, aleja la posibilidad de reunir la mesa de diálogo y avisa que no se puede reactivar mientras Cataluña "esté en interinidad", hasta después de las elecciones del 14-F. En una entrevista al Periódico, Aragonès remarca que de momento lo que hace falta es buscar fórmulas para "preservar" el instrumento y dice que cuando se tenga que volver a poner en marcha la mesa se decidirá entre Junts y ERC. "Han inhabilitado el presidente y esto lo altera todo", subraya.
El vicepresidente en funciones también dice que "ya se verá" si el próximo Govern cuenta con el apoyo de los comunes pero avisa que el ejecutivo "tiene que ser independentista". Además, confía que se pueda sumar la CUP.
En cuanto a un pacto con el PSC, Aragonés dice que la formación de Miquel Iceta "de socialista sólo tiene la sigla". "Lo vemos en la Comunitat de Madrid, cuando no se atreven a hacer a un gobierno neoliberal del PP lo que, por mucho menos, harían con Cataluña", añade.
Al ser preguntado por los presupuestos del Estado, Aragonés defiende que "den respuestas a la gente" y apuesta por salir de la crisis económica haciendo más gasto público. Aún así, y aunque dice que antes de decidir nada hay que ver la propuesta, lo vincula también a la situación política de Cataluña, con "represión y un conflicto político" que el gobierno español se comprometió a solucionar.
