El secretario de Salud Pública del gobierno catalán, Joan Guix, ha situado en una comida de más de 80 personas el pasado 28 de febrero, donde asistió personal médico del Hospital de Igualada y una persona previamente infectada por el coronavirus, como el inicio del brote que afecta diferentes municipios del Anoia (Igualada, Vilanova del Camí, Santa Margarida de Montbui y Òdena) y que desde hace una semana permanecen confinados para evitar una mayor propagación de la pandemia.
Guix ha afirmado que así lo recoge un informe que han elaborado cuatro epidemiólogos y cinco administrativos. Según ha apuntado el secretario de Salud Pública, el hecho que a la comida asistiera una persona que formaba parte de un "clúster familiar" (detectado el día 9 de marzo) afectado por el coronavirus es un elemento clave en el desarrollo de los acontecimientos posteriores.
El responsable de Salud Pública del ejecutivo catalán ha indicado que la contaminación de parte de estos asistentes presenta dos direcciones: un grupo de infectados dentro del hospital y otro fuera del recinto hospitalario.
Por otro lado, en la misma comparecencia de prensa la subdirectora del Servicio Catalán de Salud, Marta Chandre, ha revelado que profesionales médicos del Hospital de Bellvitge asistirán al Hospital de Igualada, dado que una parte de los médicos y de los enfermeros de este último centro se encuentran confinados en sus casas por la pandemia.
