Una orden dictada por Instituciones Penitenciarias del ministerio del Interior posibilita que presos en tercer grado o que se benefician de la flexibilidad del artículo 100.2, como es el caso de los dirigentes del proceso encarcelados, puedan quedarse en casa durante la crisis del coronavirus sin volver al centro penitenciario para pasar la noche, publica Europa Press citando fuentes de la misma institución.
Según esta información, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha desarrollado el contenido del real decreto sobre el estado de alarma mediante un oficio que deja a manos de las juntas de tratamiento de las prisiones el estudio de la aplicación individual de esta opción.
Si se aplica a los dirigentes del proceso presos, que podían salir durante algunas horas para trabajar o hacer tareas de cuidado de familiares hasta que han quedado confinados por la declaración del estado de alerta, Instituciones Penitenciarias los vigilará con pulseras telemáticas o, alternativamente, mediante el control telefónico.
