Este sábado ha muerto en Barcelona Macià Alavedra, ex consejero del Gobierno de la Generalitat. Fue una de las figuras clave en los gobiernos de Jordi Pujol, desde el principio hasta prácticamente su final. De 84 años, Alavedra, con un talante liberal y pactista, era viudo de la pintora Doris Malfeito y arrastraba problemas de salud.
El legado del ex consejero se ha visto manchado en estos últimos años de vida por el caso de corrupción Pretoria, por el cual lo habían condenado a once meses de prisión y una multa de más de 3 millones de euros; llegó a un acuerdo para no ingresar en prisión en que reconocía los delitos.
Alavedra fue uno de los hombres clave de los gobiernos de Pujol, con quién dirigió los departamentos de Gobernación, Industria y Economía. El que fue uno de los padres del Estatuto de Sau pasó al exilio francés buena parte de su niñez.
El 1997, después de negociar el pacto del Majestic que invistió presidente a José María Aznar con los votos de CiU, Alavedra dejó la política activa y pasó a presidir Autopistas de Cataluña, una empresa pública. También ocupó cargos en la concesionaria Abertis. Formó parte del consejo de notables de CDC y todavía ahora mantenía relación con la familia Pujol.
