En el equipo de gobierno que preside Quim Torra, la cuota de Junts per Catalunya (JxCat) cuenta con seis de los 13 consejeros. De estos, hay dos que han ostentado cargos ejecutivos en el Ayuntamiento de Sant Cugat durante el mandato de Mercè Conesa, la hasta ahora presidenta de la Diputación de Barcelona y flamante nueva presidenta del puerto: Damià Calvet y Jordi Puigneró.
Sant Cugat es el municipio con la renta más alta de Cataluña y, desde hace años, se ha convertido en un importante feudo del poder convergente. De aquí ha salido una hornada de políticos que han ocupado puestos clave en la Generalitat (Lluís Recoder, Xavier Martorell, Joan Pinyol, Pau Villòria o el mismo Jordi Turull que, a pesar de ser de Parets, fue gerente del Ayuntamiento).
El nuevo consejero de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, era, hasta ahora, el teniente de alcalde de Urbanismo, Hacienda y Economía del consistorio, cargo que compatibilizaba de manera totalmente irregular con el de director del Incasòl. Damià Calvet conoce muy bien el departamento de Territorio y Sostenibilidad, ya que fue jefe de gabinete del ex-consejero Pere Macias (1997-2001) y, con posterioridad, director general de Arquitectura y Vivienda y secretario de Territorio y Movilidad.
Se lo considera un «mago» de los trapicheos urbanísticos, como ha quedado demostrado en los numerosos conflictos especulativos que se han denunciado en Sant Cugat en los últimos años. Como director del Incasòl ha participado en la operación de venta de la gran parcela del Prat a Amazon y en la redacción del proyecto del complejo de juego BCN World, en Tarragona.
Su compañero en el consejo ejecutivo, Jordi Puigneró, también ha sido concejal del Ayuntamiento de Sant Cugat entre los años 2005-13, donde fue teniente de alcalde de Gobernación, Seguridad, Movilidad y Tecnología. Jordi Puigneró fue fichado por Artur Mas para dirigir la política de telecomunicaciones y ciberseguridad, donde la Generalitat ha invertido más de 2.000 millones de euros en adjudicaciones que están llenas de irregularidades y que están siendo investigadas judicialmente.
Como nuevo consejero de Políticas Digitales y Administración Pública (antes, Gobernación), Jordi Puigneró -que fue detenido e investigado por el juzgado n. 13 por su participación en la organización del referéndum del 1-O (operación Anubis)- tendrá que decidir qué hace con Jordi Castells, actual subdirector general de Cooperación Local, detenido e investigado por el juzgado n. 1 por su participación en el fraude en las subvenciones destinadas a cooperación de la Diputación de Barcelona (operación Estela).
A banda del ‘clan’ de Sant Cugat, en el organigrama del nuevo gobierno catalán también tiene un peso específico el ‘lobby’ de Igualada, con dos consejeras: Alba Vergés (ERC), titular de Salud, y Àngels Chacón (PDECat), de Empresa y Conocimiento. Además, el alcalde de Igualada, Marc Castells, será, con gran probabilidad, el nuevo presidente de la Diputación de Barcelona, en sustitución de Mercè Conesa. De todas formas, la potencia del ‘clan’ de Sant Cugat en la estructura del nuevo poder político catalán supera con creces al del ‘lobby’ de Igualada.
