Este jueves, el Parlamento de Cataluña ha aprobado la ley de reparación jurídica de las víctimas del franquismo y sus familiares, impulsada por Junts pel Sí, la CUP, Catalunya Sí que es Pot (CSQP) y el PSC. Esta ley comportará la anulación de todos los juicios sumarísimos y condenas de todo tipo, que serán nulas de pleno derecho y, por lo tanto, se considerarán ilegales los tribunales franquistas.
En una rueda de prensa de este miércoles, el portavoz de la Comisión de la Dignidad, Josep Cruanyes, ha explicado que considera que con este nuevo paso, que tiene como objetivo lapidar los juicios sumarísimos en Cataluña, se «romperán muchos tabúes que se han mantenido durante muchos años para impedir hacer justicia con las víctimas«. Cruanyes ha «celebrado» que esta ley declare ilegales los tribunales franquistas y anule sus actos «de una manera jurídica y práctica, y no como una simple declaración de principios», como había hecho hasta ahora el Parlamento catalán.
Por otro lado, el diputado de CSQP, Joan Josep Nuet, ha querido remarcar la «lucha democrática de las entidades para reparar las víctimas del franquismo». Nuet ha lamentado que «mientras el PP le pone una medalla al franquista Rodolfo Martín Villa«, hoy «el Parlamento devuelve la dignidad a las víctimas«.
En cuanto a la CUP, la diputada Mireia Boya ha asegurado que este jueves «rompemos con el régimen del 36 y el del 78, que es lo mismo, un acto de dignidad del pueblo de Cataluña». La cupaire ha calificado este acto de «ruptura» y de regreso a la «legalidad republicana«. «Este país se vuelve soberano, no seremos todavía una república, pero diremos al mundo que no queremos prácticas fascistas», ha indicado Boya.
