La cumbre independentista que ha convocado este lunes el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, no ha servido para decidir ni la fecha ni la pregunta para un posible referéndum independentista, que desde el gobierno catalán se pretende hacer el mes de septiembre.
Puigdemont ha convocado a las fuerzas proclives al referéndum al Palau de la Generalitat y han participado Marta Pascal del PDeCat, Marta Rovira de ERC, Anna Gabriel y Natàlia Sànchez de la CUP, Toni Castellà de Demócratas, Albano Dante Fachin de Podemos, Alfons Palacios de MES y un representante de Avanzamos, además del vicepresidente catalán Oriol Junqueras, el consejero de Exteriores, Raül Romeva, y la consejera de Presidencia, Neus Munté. También han paticipat los diputados de Junts pel Sí, Lluis Llach y Jordi Turull.
Munté que ha sido la encargada de atender a los medios de comunicación una vez acabada la reunión ha reprochado a los comunes su «autoexclusió» al encuentro, porque la formación de Xavier Domènech y Ada Colau sí que han «secundado» la propuesta de ir al Congreso a reclamar el referéndum. La consejera de la Presidencia ha afirmado que «podían haber reclamado el Pacto Nacional en la misma cumbre».
La reunión de este lunes se interpreta como la apuesta hacia una nueva fase del procés después de la enésima negativa de gobierno central a sentarse a negociar el referéndum. Una apuesta hacia la voluntad del gobierno catalán a utilizar la vía unilateral, pero sin descartar un acuerdo dialogado de última hora con el ejecutivo de Mariano Rajoy.
La consejera portavoz ha afirmado que «no damos por muerta la vía del diálogo», añadiendo que el gobierno catalán tiene el «compromiso» de escuchar los ciudadanos a partir de la «mayoría social y parlamentaria» que está a favor del referéndum. Munté se ha mostrado convencida que es el Estado quién da por muerta la vía del diálogo.
Neus Munté ha justificado la ausencia de concreción en cuanto a la fecha y la pregunta del futuro referéndum asegurando que la reunión de hoy tenía por objetivo «intercambiar opiniones sobre las continuas negativas en diferentes formatos para acordar el referéndum». Munté ha afirmado que «iremos hablando con todo el mundo, y en pocas semanas, una o dos como mucho, tendremos fecha y pregunta«.
