El consejo político de la CUP ha decidido por un estrecho margen -29 votos contra 26 y 3 abstenciones- mantener su enmienda a la totalidad sobre los presupuestos del Gobierno de Junts pel Sí (es decir, tumbarlos), una decisión que ha provocado una cascada de reacciones por parte de figuras relevantes del proceso soberanista.
La diputada cupaire Anna Gabriel ha asegurado, en declaraciones a Catalunya Ràdio, que los presupuestos del Gobierno que presidente Carles Puigdemont «contravienen la declaración del 9N». «No es suficiente lo que nos han puesto encima de la mesa», juzga. Según Gabriel, «el pacto de estabilidad está vigente en la medida que la declaración del 9N se quiera sacar adelante y se sitúe en el centro de la vida política».
Este martes, cuando se ha conocido la negativa cupaire, la portavoz del Gobierno catalán, Neus Munté, ha acusado a la formación anticapitalista de incumplir «el acuerdo» y ha avisado que «esto tendrá consecuencias». De entrada, ha manifestado que «la legislatura queda tocada».
Homs y Calzada
Los números uno de las listas barcelonesas que Convergència presentará al Congreso de los Diputados y al Senado el 26-J, el ex consejero Francesc Homs y el comunicador Miquel Calçada, también se han expresado. Homs interpreta la decisión cuparie como «una trastada, una coz al proceso», que ve «tocado», si bien augura que «lo reharemos». Calzada, por su parte, ha piado que «El sr. Aznar ha ganado otra batalla. Felicidades».
Otros cupaires
El malestar por el veto cupaire a los presupuestos, sin embargo, va más allá de las filas convergentes y del Gobierno de la Generalitat. Dos voces anticapitalistas han sonado bastante claras en ese sentido. Antonio Baños, cabeza de lista de la CUP en las elecciones al Parlamento de Cataluña y ex diputado, en una línea parecida a la de Homs, considera que la negativa cupaire es «una de las catástrofes y dramas, pero nos mantendremos vivos», añadiendo que si bien defiende «este espacio político de la izquierda independentista», «si hoy veo que la CUP vota lo mismo que Xavier García-Albiol, se me revolverá el estómago».
El concejal de la CUP en Girona,Lluc Salellas (hermano del diputado Benet Salellas), ha publicado en Twitter este mensaje: «Desde la amplia minoría de ayer, con la sensación de perder una sábana en cada colada, de ir aislándonos, de perder humildad. ¡Aspereza!». Menos explícita ha sido la diputada Mireia Boya: «diría tantas cosas que no diré nada».
Para Pilar Rahola, opinadora estrella del Grupo Godó y biógrafa del ex presidente Artur Mas, que acabó desesperada hace unos meses por la negativa persistente de los cupaires a investir a Mas, «Unos iluminados sectarios y dogmáticos se cargan el sueño de un pueblo». «Que la historia los juzgue», concluye en Twitter.
