Un espectacular palacete en la avenida del Tibidabo, a la parte más upper de Barcelona, es la sede oficial de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), un centro docente que ofrece estudios a distancia mediante la aplicación intensiva de las tecnologías online. Fundada en 1996 bajo el impulso de Gabriel Ferraté -ex rector de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) y hombre de la máxima confianza del ex presidente Jordi Pujol- la UOC tiene, en la actualidad, un «campus virtual» con 49.672 alumnos, muy lejos de los 63.577 que llegó a sumar en el curso 2011-2012. Persona de gran valía científica y académica, Gabriel Ferraté tuvo el «privilegio» de vivir en primera persona el derrumbe financiero de Caixa Tarragona, entidad de la que fue presidente entre 2005 y 2010, antes de su fusión y posterior liquidación.
Fundación privada
Según especifica en su página web, la UOC imparte este curso un total de 21 grados universitarios, 76 másters y 140 programas de posgrado. Cuenta con una plantilla de 769 empleados y profesores, además de 3.454 colaboradores docentes. Además de ser una universidad a distancia tiene delegaciones presenciales en numerosas ciudades catalanas (Terrassa, Lleida, Manresa, Tortosa…), además de Madrid, Sevilla, Valencia, Villarreal y Ciudad de México.
A pesar de que la UOC «no tiene fronteras» y presume de tener alumos en más de 70 países de todo el mundo, lo cierto es que su actividad es fuertemente deficitaria y necesita, año tras año, de cuantiosas inyecciones de dinero público de la Generalitat para equilibrar su presupuesto, que supera los 90 millones de euros anuales. El ejercicio de 2014, auditado por Deloitte, lo cerró con unas pérdidas, a pesar de las subvenciones públicas recibidas, de 778.325 euros. […]
Lluvia de millones
Con el gobierno de Artur Mas en funciones, el consejero de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Colell, firmó, el pasado 16 de diciembre, el convenio que regula las aportaciones de la Generalitat a la UOC durante el periodo 2015-2019: en total, 119,1 millones de euros! Con una particularidad: estas subvenciones se concentran en las anualidades 2016 (29,7 millones), 2017 (29,7 millones) y 2018 (29,7 millones). En cambio, para el año 2019 sólo se contemplan 2,4 millones de euros (?).
Cabe añadir que Andreu Mas-Colell es miembro del patronato de la FUOC en representación de la Generalitat. Si miramos el convenio con lupa, hace daño a los ojos…
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