Jordi, Josep, Pere y Oleguer Pujol Ferrusola se embolsaron 2,3 millones de euros con la venta de sus acciones en la empresa de análisis clínicos General Lab, una de las operaciones que movieron a la Audiencia Nacional a poner en marcha los registros de esta semana. El juez José de la Mata considera que los cuatro hijos del expresidente se enriquecieron gracias al empresario Carles Sumarroca.
Según publica El País, citando las interlocutorias de entrada y registro, Sumarroca, uno de los imputados en el caso de Jordi Pujol Ferrusola, «favoreció, sin que conste justificación» a los hijos del expresidente de la Generalitat ofreciéndoles «a un precio significativamente inferior al real en aquellas fechas» las acciones (42.000 euros), propiciando «la obtención de importantes beneficios».
El 2005, los cuatro hermanos, mediante MT Tahat, adquirieron 700 acciones de Proelec, sociedad patrimonial de los Sumarroca poseedora de participaciones de General Lab. La operación también levanta sospechas porque no figura en ninguna parte ni el contrato de la venta de las participaciones y tampoco la forma de pago, revela El País.
Las palabras de De Rosa
General Lab aparece en el audio de la conversación entre el financiero Javier de la Rosa y el pequeño Nicolás que reveló Público el pasado 16 de abril. De laRosa, antiguo amigo personal de Xavier Trias y figura muy bien conectada con las élites políticas durante el apogeo del pujolismo, explicaba sobre los Sumarroca que General Lab (ahora del grupo LabCo) era uno de los negocios más conocidos de esta familia cercana a Pujol: «les dieron toda la sanidad de Catalunya», «todos los hospitales tenían que pasar por General Lab». Este y otros negocios de los Sumarroca, relataba De la Rosa, suponían «dinero para Pujol también». «No son sólo las relaciones accionariales, ni las facturas, son socios de toda la vida, les guardan el dinero», exponía.
