El Human Capital Index 2015, elaborado por el Foro Económico Mundial, ha estudiado 124 países y sitúa a España en el 41º lugar. El año pasado ocupaba el 29º puesto del mismo ranking.
Este índice, que analiza la optimización y el desarrollo del potencial humano, penaliza la elevada tasa de desocupación española, que causa estragos en la formación en el entorno laboral, que se ve reducida sobre todo entre los jóvenes.
Una de los datos positivos en España es la capacidad para captar personal apto, a pesar de que este talento a menudo se desperdicia.
Finlandia, Noruega, Suiza, Canadá, Japón, Suecia, Dinamarca, Holanda, Nueva Zelanda y Bélgica ocupan las diez primeras posiciones.
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