El excoronel de la Guardia Civil, José Matas Zapata ha negado en varias ocasiones haber sido, como afirmaban varios diarios y el diputado de la CUP David Fernàndez, el nexo de la familia Pujol con Andorra. Interrogado por la mayoría de diputados por su supuesta vinculación con el clan Pujol, el ex Guardia Civil, hoy retirado en Marbella, después de haber trabajado en la frontera y con la banca andorrana durante años ha comparecido este lunes en la comisión que investiga el fraude y la corrupción para desmentir estas informaciones.
Ni las súplicas del presidente de la comisión, David Fernàndez, han servido para que el excoronel, que se ha definido como «la chica para todo» por las relaciones que tenía con las instituciones españolas y los bancos andorranos, dé nombres de clientes con cuentas bancarias abiertas en el paraíso fiscal de los Pirineos. «Diga, diga… que hará un favor a la democracia», ha espetado Fernàndez, ante el silencio del exdirigente.
«Es una insensatez que una persona conocida traiga dinero a Andorra porque por una cantidad pequeña te lo hacen«, ha explicado, para mirar de aclarar para qué no servían los repetidos viajes de Pujol Ferrusola al país de los Pirineos.
Matas Zapata sí que ha rebelado que «por 300.000 pesetas nos daban las cuentas de cualquier persona y los últimos movimientos bancarios. Hay muchas personas muy conocidas y muy famosas. Cuando altos cargos se enteraron que yo podía hacerlo me lo pidieron para espiar a adversarios políticos», ha rebelado.
«Todos los países que tienen paraísos fiscales tienen permisividad. Ahora pasa lo mismo, pero no se sabe hacer como antes. Durante mucho tiempo, el Estado -español- ha considerado que la evasión fiscal no era importante y ha dejado que ciudadanos enviaran el dinero a lugares como a Andorra», ha dicho el antiguo colaborador con los servicios de inteligencia del Estado.
«España tenía que defender tener un paraíso fiscal suave. Andorra siempre ha sido poca cosa, las sociedades en Andorra no tienen la importancia de las de Gibraltar, por ejemplo. A los países les interesa tener paraísos fiscales: Gran Bretaña tiene varios, EEUU… El dinero subía a Andorra con la misma facilidad con que bajan a España azúcar y mantequilla», ha explicado.
