Terremoto en Pedralbes, el barrio de la gente rica de Barcelona. La Fiscalía se ha querellado contra Lily Godia y su marido, Manuel Torreblanca, dos exponentes de la ‘beautiful people’ catalana, por escaquear más de cinco millones de euros a Hacienda con escandalosos gastos particulares que imputaban a sus empresas para desgravar y que denotan la vida ‘a todo tren’ que llevan.
Poco le ha durado al matrimonio Godia la alegría por la venta de su 25% de la empresa propietaria del Hotel W de Barcelona al fondo de inversión qatarí Diar. El hotel de Ricardo Bofill era un ‘muerto’, heredado de la quiebra de la inmobiliaria Sacresa, que lastraba su cartera de inversiones y que, finalmente, se han conseguido sacar de encima, eso sí, con importantes minusvàlues.
Horas después de hacerse pública la venta del hotel W, del cual Liliana (Lily) Godia y Manuel Torreblanca poseían el 25% de la sociedad patrimonial (leed EL TRIANGLE número 1.116), la Fiscalía de Delitos Económicos presentaba una querella criminal en el juzgado de guardia donde se imputa al glamuroso matrimonio un cúmulo de delitos contra la hacienda pública que suman 5.755.898,40 euros. Si la venta de su participación en el hotel de la bocana del puerto de Barcelona les ha reportado 50 millones de euros, ahora se exponen a una sanción multimillonaria por sus trapicheos para escapar de sus obligaciones tributarias.
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