La CUP y ERC han declinado participar en un ciclo de presentaciones de partidos independentistas organizado por el ANC de Sabadell porque también está invitada la formación de extrema derecha Alianza Catalana. «Es un error estratégico pretender normalizar la extrema derecha, lleve la bandera que lleve», ha afirmado ERC.
La polémica ha provocado la reacción del Secretariado Nacional de la entidad, que si bien ha recordado que las asambleas territoriales son «soberanas» para convocar y organizar actas también ha subrayado que «tienen que respetar el código ético» de la organización, «que señala que a la Asamblea no hay cabida al odio ni a la discriminación a minorías o a colectivos en función de su raza, religión, género u orientación sexual».
El Secretariado Nacional también ha remarcado que la Asamblea «continuará fomentando el debate democrático independentista, siempre que este no friccione con la intolerancia y el odio».
La CUP, por su parte, ha dirigido un comunicado a la asamblea de Sabadell en que considera que la entidad se equivoca al dar «un micrófono» a una formación que, en materia de inmigración, «defiende las mismas políticas que Vox».
