La dirección de la prisión de Mas d’Enric del Catllar ha retirado de la cocina quince presos condenados por delitos y homicidios violentos, según ha avanzado El Nacional y han confirmado fuentes del departamento de Justicia a la ACN.
La medida llega tres semanas después del asesinato de la cocinera del centro penitenciario tarraconense por parte de un interno que trabajaba en la cocina y de las posteriores movilizaciones de los trabajadores de las prisiones catalanas.
Se trata de una decisión que se suma a los cambios hechos en las prisiones de Ponent y Lledoners, donde ya se han apartado cinco y tres reclusos respectivamente de este servicio.
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