La diputada no adscrita Cristina Casol, expulsada recientemente del grupo de Junts, ha acusado a la presidenta del Parlament de Cataluña, Anna Erra, de haber utilizado su cargo de forma «partidista» en su caso y en el de Aurora Madaula.
«Cuando eres presidenta de una institución, debes intentar que todos los diputados se encuentren bien. Y cuando sientes que alguien está sufriendo, lo primero que tienes que hacer es ver qué ocurre», ha argumentado en una entrevista concedida a RTVE.
Casol ha recriminado a la presidenta del Parlamento catalán que pidiera a Madaula que se dejara su cargo en la Mesa, cuando la diputada de Junts denunció violencias silenciadas por parte de compañeros del grupo, y ha lamentado también la actitud que tuvo con ella. «La presidenta Erra conmigo no ha hablado. Todos lo dan todo por sentado», ha añadido.
La diputada, además, ha dicho que ve «mala intención» en la decisión de situarla, como diputada no adscrita, en una zona del hemiciclo donde están los diputados de Vox y de Cs. «Me sabe mal que Junts y PSC se pongan de acuerdo para ponerme allí. Me ponen en un ambiente que es más duro para mí», ha dicho.
Casol ha considerado que Junts es un «partido machista» porque, según ha asegurado, ella ha sufrido machismo por parte del grupo de Junts en el Parlamento de Cataluña, al que ha atribuido una «manera antigua de hacer política» basada en «estar conmigo o contra mí». En concreto, ha responsabilizado al presidente de Junts en la cámara, Albert Batet, de su caso. Aunque ha admitido que la presidenta de Junts, Laura Borràs, no le ha apoyado en público de forma explícita, ha asegurado que sí lo ha hecho implícita y personalmente.
