El presidente de la Generalitat de Catalunya, Pere Aragonès, ha considerado “imprescindible” aprobar la ley de amnistía y ha defendido que la propuesta es “robusta y sólida”. En declaraciones a los medios desde Bruselas este martes, Aragonès no se ha querido posicionar sobre los cambios en la ley que reclama Junts, pero ha afirmado que “siempre se puede seguir trabajando” y que “lo importante es llegar a un acuerdo” que permita «superar la represión».
En referencia al espionaje de los servicios de inteligencia españoles, el jefe del ejecutivo catalán ha manifestado que «si la excusa es que defiendo la independencia, me seguirán espiando toda la vida hasta que lo consiga». Este martes, cuando el Congreso vota la ley de amnistía, Aragonès ha viajado a la Comisión Europea (CE) para reunirse con el responsable europeo de Economía, Paolo Gentiloni, con la vicepresidenta de la CE y responsable de Democracia y Demografía, Dubravka Šuica, y con la comisaria europea de Cohesión y Reformas, Elisa Ferreira.
Con esta visita de dos días, el gobierno catalán quiere llevar a Bruselas la defensa de la ley de amnistía y de la oficialidad del catalán en Europa. Para el ejecutivo de Aragonès, los encuentros con cuatro comisarios demuestran que Cataluña «ha recuperado la máxima interlocución» con las instituciones europeas. La cuarta reunión está prevista para el miércoles y será con el vicepresidente ejecutivo de la CE y responsable del Pacto Verde Europeo, Relaciones Interinstitucionales y Prospectiva, Maroš Šefčovič.
