El Gobierno de la Generalitat ha aprobado este martes un plan de acción para combatir la presión estética hasta 2026, a propuesta del Departamento de Igualdad y Feminismos e impulsado por el Instituto Catalán de las Mujeres.
Según difunde la ACN, es un plan sin precedentes a nivel internacional dotado con una partida presupuestaria de 10,6 millones de euros que pretende atacar tanto las causas como las consecuencias de la presión estética.
El objetivo, según la misma información, es dar una respuesta coordinada y transversal a la presión estética, que considera una forma de violencia simbólica contra las mujeres, mediante 68 acciones en ámbitos como la moda, la alimentación, el consumo, el audiovisual, el deporte, el mundo laboral, la educación y la salud.
El plan contempla, entre otras iniciativas, impulsar un acuerdo con las principales marcas de moda para fomentar la neutralidad corporal y una oferta de tallas más amplia, la elaboración de un código de buenas prácticas contra las representaciones estereotipadas, la incorporación de la diversidad corporal en la programación de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), y diversas medidas para tratar de erradicar el imaginario que normaliza la presión estética.