El Gobierno de la Generalitat ha declarado este martes la situación de emergencia por sequía en el embalse Darnius Boadella (Alt Empordà), ya que se encuentra al 17% de su capacidad, y en los 12 municipios que dependen.
La Comisión Interdepartamental de Sequía, en concreto, ha decidido que Cabanes, Cadaqués, Castelló d’Empúries, Figueres, Fortià, Llers, Riumors, Roses, Santa Alquila de Álguema, Vilamalla, Vila-sacra y el Far d’Empordà se sumen en los 22 municipios que dependen del acuífero del Fluvià Muga, también en la comarca del Alt Empordà, y a los dos que se abastecen del embalse de Riudecanyes (Baix Camp), que se encontraban en la misma situación.
La Agencia Catalana del Agua (ACA) había propuesto declarar el estado de emergencia, tal y como determina el plan de sequía, con el objetivo de evitar que los municipios que dependen del embalse de Darnius Boadella tengan problemas de abastecimiento . En total, serán 149.000 habitantes los que estarán en la fase de emergencia: 123.080 de Darnius Boadella, 24.399 del Fluvià Muga y 1.692 de Riudecanyes.
Con la entrada en emergencia, se fija una dotación global de agua de 200 litros por habitante y día de media por municipio. En cuanto al resto de usos, en el escenario de emergencia se suprime el riego agrícola (se puede autorizar sólo el riego de supervivencia de cultivos leñosos), se debe reducir un 25% los consumos de agua de los usos industriales, así como el consumo de agua en los usos recreativos (25% en usos asimilables a urbanos y la supresión total del riego), especifica la Agència Catalana de Notícies (ACN).
