El líder del PP y candidato a la investidura, Alberto Núñez Feijóo, llamará en las próximas horas al presidente del gobierno central en funciones y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, para probar de concretar una reunión. Según el vicesecretario de Cultura del PP, Borja Sémper, se trata de un encuentro en clave de «normalidad institucional» una vez Feijóo ha sido designado como candidato por el rey Felipe VI. Feijóo mantiene la pretensión de reunirse con Junts y ERC en la ronda de contactos con las formaciones parlamentarias, e incluye ahora una ronda con todos los presidentes autonómicos del Estado.
«Creemos que ha llegado el momento de contactar con el candidato de la segunda formación en resultados en las elecciones generales, y Feijóo quiere saber la disponibilidad de Sánchez para avanzar en las reformas y la estabilidad», ha explicado Sémper en rueda de prensa en la sede del PP. El popular ha insistido en que su partido y el PSOE tienen una «responsabilidad» de buscar «una estabilidad y gobernabilidad del país» para defender «los intereses comunes de los ciudadanos». Por eso, según Sémper, el encuentro entre Sánchez y Feijóo tendría que servir para allanar «un camino nuevo a la política española».
Por otro lado, Feijóo también quiere abrir una ronda de conversaciones con los presidentes autonómicos para conocer «su posición, necesidades y requisitos», además de la «ronda de conversaciones institucionales con todos los grupos representados en el Congreso salvo Bildu».
El PSOE reclama disculpas al PP
La portavoz del PSOE y ministra de Educación en funciones, Pilar Alegría, ha reclamado este lunes al líder del PP que antes de llamar a Sánchez para celebrar una reunión se «disculpe» por los «insultos» al PSOE y «rectifique» sus «llamamientos al transfuguismo» de los diputados socialistas. «No sé qué se piensa que es el PSOE, pero esta es una organización seria que se merece respeto», ha manifestado Alegría, que ha recordado que los populares «día sí y día también dicen que el PSOE no es un partido de Estado» e «insultan a los millones de votantes socialistas». «Ellos juegan al transfuguismo, nosotros no», ha concluido.
