Barcelona ha homenajeado este jueves a las víctimas del atentado del 17 de agosto del 2017, que tuvo lugar ahora hace seis años. El acto de recuerdo se ha hecho en el memorial del Pla de l’Ós de la Rambla, en el tramo donde acabó el recorrido mortífero la furgoneta que atropelló a varias personas. Víctimas y familiares se han congregado en este punto para depositar claveles blancos en cuatro jardineras mientras una violonchelista interpretaba El cant dels ocells.
Al acabar el acto, los familiares y las víctimas han hecho seis minutos más de silencio como símbolo de protesta por los años que hace que no se sienten escuchados por los políticos desde el 17-A. El acto ha sido sobrio y sin discursos oficiales, con el silencio y los claveles blancos como símbolo de pureza y principales protagonistas para recordar a todas las personas que murieron aquel trágico 17 de agosto.
El homenaje ha contado con la participación de víctimas y familiares y de representantes de todas las instituciones. La primera línea política la han encabezado el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, junto con la presidenta del Parlamento catalán, Anna Erra; la consejera de Justicia, Gemma Ubasart; el delegado del gobierno central en Cataluña, Carlos Prieto; y la teniente de alcaldía del Ayuntamiento de Barcelona Laia Bonet.
Posteriormente, han depositado las flores la exalcaldesa de Barcelona y líder de BComú, Ada Colau, y otros representantes de todos los grupos políticos del consistorio. También han asistido al acto otros políticos como la expresidenta del Parlament y líder de Junts, Laura Borràs; la vicesecretaria y portavoz de ERC, Marta Vilalta; y diputados de la cámara catalana. Al acabar el acto, quien también se ha acercado a hablar con los familiares de las víctimas ha sido la alcaldesa de Ripoll, Sílvia Orriols.
