El mes de junio acabó con complicaciones en varias líneas de los Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya (FGC). Los aguaceros de los últimos días de ese mes y las deficiencias habituales del servicio ocasionaron problemas en las líneas R5, R50 y R6-R60. El día 29, la línea Llobregat-Anoia sufrió retrasos de más de quince minutos «debido a la aglomeración de agua en la vía por precipitaciones», según informó FGC. Al día siguiente los problemas se daban en las líneas R6-R60, donde tuvo que suspenderse por la mañana la circulación de un tren entre las estaciones de Piera y Martorell Enllaç “debido a un árbol en la vía en la estación de Masquefa”.
Julio no empezó mejor. El día 4, también de buena mañana, la compañía informaba de que en la línea Barcelona-Vallès “el servicio de trenes con origen en plaza Catalunya funciona con las frecuencias de paso alteradas a causa de una avería de tren”. A los problemas para los usuarios causados por estas incidencias habituales en el servicio de FGC se han añadido, este verano, los ocasionados por “las obras de mejora en las infraestructuras” que se están realizando en la línea L8. Estas afectaciones empezaron el 7 de julio y durarán hasta el 3 de septiembre. Obligan, entre otras complicaciones para los pasajeros, a realizar en autobús sustitutorio el desplazamiento entre las estaciones de Barcelona-plaza Espanya y Molí Nou Ciutat Cooperativa, en ambos sentidos, todas las noches de viernes y sábado. Además, del 12 al 20 de agosto no habrá servicio entre Gornal y L’Hospitalet Avenida Carrilet y habrá que recurrir también al desplazamiento en autobús, con la consiguiente pérdida de tiempo.
En la nota que ha distribuido FGC se afirma que «se modifican todos los horarios, tanto en día laborable como en festivo durante todo el período de afectación» y se anima a los ciudadanos a consultar los cambios de horario en las vitrinas de la estación, la web o la aplicación de FGC o llamando al 012. El caso es que muchos pasajeros han denunciado que las instrucciones a las que les remite la compañía son confusas. “En serio, el tema de los horarios de los FGC no hay por dónde cogerlos. ¿Alguien sabe qué cojones de tren tengo que coger para saber llegar a sitio? ¡¡El que ha hecho el PDF de los horarios es fan del escape room!!”, lamenta el usuario Gabriel.
“Cada veranito lo mismo”, se ha quejado Rafa García. «Cada verano nos ponéis más fácil el trayecto a la oficina, al hacer cambios random de tren a bus a 40 grados y con horarios que en ningún caso se adaptarán a lo indicado», ironizaba Manuel Gálvez. «Cada verano con las mismas mierdas, como si la gente ya no tuviera que ir a trabajar», escribía una indignada Eva Bukowski. Mikel Martínez denunciaba discriminación entre líneas de los FGC: “La R5 sólo incrementa en 6 minutos el recorrido. ¿Por qué la R6 hasta 19 minutos? ¿Lo veis razonable?”. Y añadía con contundencia: “Vuestro servicio en la R6 es tercermundista. 1 hora y 50 minutos para hacer 60 kilómetros es por lo menos una vergüenza”.
Mientras, las incidencias y los retrasos habituales se han ido sucediendo. El responsable del Twitter de FGC se hizo un lío el pasado 10 de julio cuando intentaba justificar una incidencia en la línea R6. Primero dijo que «hemos tenido una avería en el tren y circula con 6 minutos de retraso» pero después cambió la explicación: «rectificamos la información que te hemos dado antes. Con motivo de las obras que empezaron el sábado, este tren no circula”. Y adjuntó en la respuesta que dio al usuario que hizo la consulta el famoso PDF con los horarios que no todo el mundo sabe interpretar adecuadamente.
Todo esto, mientras en la campaña electoral los partidos independentistas exigen el traspaso del servicio de Cercanías RENFE al gobierno de la Generalitat para que oa gestione como lo hace con sus ferrocarriles. Otro usuario de Twitter, Pau, ofreció un consejo a los pasajeros cansados de los problemas, retrasos e incidencias en Ferrocarrils de la Generalitat: “Pues viajad con Rodalies, ya está. Además es gratis con el bonus recurrente”.
