El Tribunal de Cuentas ha acordado juzgar el 17 de noviembre a los expresidentes de la Generalitat Artur Mas y Carles Puigdemont, el exvicepresidente Oriol Junqueras y una treintena de funcionarios y ex altos cargos más por el gasto del 1-O y de Exteriores. El juicio tendrá lugar en Madrid.
El escrito del tribunal propone interrogar a Puigdemont, Maria Luisa Lamela, Antonio Millet y Alfonso González. El Tribunal de Cuentas desestimaba a mediados de diciembre la petición de la defensa del expresidente Puigdemont y de los exconsejeros Toni Comín y Clara Ponsatí de detener la causa de la responsabilidad contable del 1-O contra los tres. El abogado Gonzalo Boye pedía que se les apartara de la causa argumentando que tienen inmunidad.
Paralelamente, la Fiscalía rebajaba en 336.143,34 euros la demanda contra los 35 encausados al retirar del cómputo la campaña ‘Civismo’. La petición del ministerio público asciende a 3,1 millones de euros.
Las defensas de los 35 exaltos cargos y funcionarios de la Generalitat piden el archivo o la anulación del caso cuestionando la legitimidad del procedimiento y los métodos utilizados, y aduciendo indefensión. También apuntan que los hechos han prescrito porque han pasado más de 5 años.
Boye argumentaba, además, que la causa se ha abordado tanto en el Tribunal Supremo como en el Juzgado 13 de Barcelona, y que por tanto el Tribunal de Cuentas pretende juzgar dos veces el mismo hecho.
El expresidente Puigdemont podrá declarar en este juicio. Lo ha pedido su abogado y después otras defensas de los encausados. Si finalmente toma la palabra lo hará por videoconferencia.
Durante la vista preliminar de mediados de diciembre, Boye también pidió que el exministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, declare en el proceso. El motivo es que Montoro, después de activar controles adicionales en las cuentas de la Generalitat, aseguró públicamente que la Generalitat no había destinado recursos públicos al proceso independentista.
