La cabeza de lista de Barcelona En Comú, Ada Colau, ha propuesto partirse la alcaldía de la capital catalana con ERC y PSC con una fórmula imaginativa: un año de alcaldía para Ernest Maragall, un año y medio para ella y un año y medio también para Jaume Collboni, con el objetivo de crear un «gobierno fuerte» que promueva «políticas progresistas» en la ciudad. Así lo ha dicho en una entrevista en RTVE, en la que ha afirmado que ya les ha planteado la posibilidad y, aunque los líderes de ambas formaciones han expresado «pesares y desconfianzas mutuas», también se han mostrado «dispuestos a hablarlo».
Colau ha afirmado que «compartir la alcaldía es un incentivo suficiente», y ha señalado que todo el mundo puede imprimir «su línea y su carácter, y también es una forma de corresponsabilizarnos». En este sentido, ha recordado que los tres partidos tienen muchos puntos en común en sus programas, y que en los últimos cuatro años se han entendido en muchas ocasiones. Además, ha defendido que esta sería una «forma pragmática, realista y viable» para evitar que gobiernen las políticas «neoliberales» de Xavier Trias, y ha afirmado que «es imposible poder gobernar la ciudad en solitario», recordando los once concejales que obtuvo el exalcalde.
Sobre los resultados electorales del pasado 28-M, Colau ha admitido que fue «una derrota ajustada y digna». «Las encuestas ya decían que estábamos todos igualados», ha aseverado. Asimismo, ha descartado un pacto Trias-Collboni porque «el PSC no se encuentra aquí, pero en todo caso es quien debe decidir», y ha admitido que le «cuesta mucho» ver a Maragall siendo el primer teniente de alcalde de Trias: «Es un hombre de izquierdas y ERC se ha distanciado de Junts en los últimos tiempos».
