La diputada de la CUP-NCG Eulalia Reguante ha avisado de que «no se puede pretender solucionar en un mes y medio lo que no se ha hecho en dos años» después de reunirse con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. La CUP y el jefe del ejecutivo se encontraron durante una hora en el despacho del presidente en el Parlament para abordar la propuesta de «frente común» contra la extrema derecha y la derecha.
Sin embargo, Reguant ha advertido que «a toda prisa» no se solucionan los problemas que «son profundos». «No se va a toque de elecciones», resumió la diputada, y añadió que en un encuentro después de «meses de desavenencias» no se solucionará la situación.
Reguante ha explicado que en la reunión no se ha hablado de ninguna lista electoral conjunta sino que se ha compartido análisis sobre cómo acabar haciendo frente a un eventual resultado de las elecciones con la derecha en el gobierno.
Además, según subrayó, ambos actores coincidieron en que las elecciones municipales representaron «un correctivo» para el independentismo.
Los cuperos, representados por Reguant, Dolors Sabater y Maria Sirvent, han trasladado a Aragonès su «preocupación» por los resultados electorales del independentismo y han apostado por hacer «una reflexión en profundidad». También explicaron que su intención es que el independentismo «sea realmente una garantía de derechos».
