La Comunitat de Regants de la Dreta de l’Ebre ha optado por distribuir de forma intermitente a lo largo del tiempo el agua de riego disponible, la mitad de la dotación prevista habitualmente, para poder iniciar la campaña del arroz. La Junta de Govern de la entidad acordó este viernes posponer el inicio de la campaña al 28 de abril. A partir de esa fecha, los regantes dispondrán del agua que emplean habitualmente durante quince días.
Posteriormente, el canal se cerrará durante diez días y se volverá a abrir otros diez días, alternando los ciclos hasta que se levanten o se endurezcan las restricciones por la sequía. Según la Comunitat, se trata de la única forma, dadas las características del canal y la red, para aprovechar la mitad de la dotación.
Los regantes se enfrentan a una situación «nueva» e «inédita» que les obligará no sólo a modificar las habituales formas de gestión del agua sino también el cultivo del arroz en el delta del Ebre para poder salvar la campaña.
En un año sin restricciones, la Comunitat de la Dreta disponía de 240 hectómetros cúbicos para la campaña. El escenario de sequía ha llevado a la Hidrogràfica de l’Ebre (CHE) a reducir a la mitad, a 250 hectómetros cúbicos la dotación para las dos comunidades del Delta.