Un centenar de vecinos alrededor de la calle de Perú han cortado los laterales de la Gran Vía el jueves 6 de abril por la tarde para exigir al Ayuntamiento de Barcelona que no elimine plazas de coche en esta vía. La protesta se ha hecho coincidiendo con la operación salida de Semana Santa, pero la afectación a la movilidad ha sido baja, ya que muchos vehículos habrían anticipado la salida de la ciudad y la Guardia Urbana ha hecho desvíos.
Estos vecinos se quejan de los problemas para aparcar si el consistorio saca adelante una reforma que consistirá, según han explicado, en eliminar 100 plazas para ampliar las aceras y, en los próximos meses, más de 800 por un carril de autobús y uno de bicicleta en los dos sentidos.
Los vecinos que se han manifestado con gritos de “Fuera Colau” acusan el gobierno municipal de no dialogar con ellos y de quererles “imponer” esta reforma. Un portavoz de los manifestantes, Edu Moreno, ha asegurado que no están en contra del proyecto para proteger los entornos de las escuelas, pero ha defendido que, si eliminan las plazas de la calle, los vecinos tendrán problemas para aparcar y también para circular en coche, porque el consistorio planea dejar un único carril de circulación, según ha dicho en declaraciones a los periodistas.
