El Índice de Precios al Consumo (IPC) subió un 1% de enero en febrero por el encarecimiento de la electricidad y los alimentos, situando su tasa interanual en el 6,1%, tras un incremento de dos décimas, según los datos adelantados publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Así pues, y a la espera de que el dato definitivo de este mes se confirme a mediados de marzo, 2023 ha comenzado con dos subidas consecutivas de la tasa interanual. Además, el IPC alcanza su mayor valor desde el 6,8% registrado en noviembre y el mayor incremento mensual desde junio, cuando subió un 1,9%.
La inflación subyacente, que no contabiliza los alimentos no elaborados ni los productos energéticos, continúa su escalada y alcanza ahora un valor del 7,7%, uno de los más altos en 40 años.
El INE destaca sobre estos datos avanzados de febrero que, a diferencia de los alimentos y la energía, los carburantes y los transportes combinados de pasajeros se abarataron por el efecto de los bonos en el transporte aprobados por el gobierno central y las comunidades autónomas.