El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, ha considerado este miércoles que, con la reforma del delito de malversación, ERC asume el marco constitucional. Sánchez ha añadido que pueden defenderse todas las ideas dentro del marco legal español y sin recurrir a la vía unilateral.
En concreto, el presidente del gobierno central, reaccionando a una intervención del portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha manifestado que le gusta escuchar que ERC asume que la democracia «siempre se fundamenta, primero, en la soberanía popular, y también en el respeto a la legalidad democrática».
Por otra parte, después de que la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, afirmara que el procés sólo acabaría cuando Catalunya fuera independiente, el presidente del gobierno le ha respondido que fue el anterior vicepresidente de Junts, Jordi Sànchez, quien dijo que el procés había terminado.
Jordi Sànchez, de hecho, manifestó este mes de octubre su sensación de que el procés, como etapa, había finalizado con la salida de Junts del gobierno de la Generalitat que compartía con ERC, una decisión de la militancia por la que había abogado la propia Nogueras, pero no Sànchez.
