Los ‘trapos sucios’ pasan factura a Ada Colau a seis meses de las elecciones

La oposición acusa a la alcaldesa de 'regar' con generosas subvenciones a dicho unas 250 entidades 'amigas' que se encargan de hacer la garra-gara a la alcaldesa de los comunes

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, afronta en su horizonte político muchos contratiempos que podrían desgastar su imagen. El dinero público, es decir, la gestión económica del Ayuntamiento, puede convertirse en su talón de Aquiles. A seis meses de las elecciones, un goteo de informaciones negativas sobre su persona puede acabar de minar su credibilidad y condenarla al ostracismo y a la marginalidad electoral. La política de subvenciones, guiada por el amiguismo, es una piedra que tiene en el zapato.

Partidos como el PP o Valents coincidieron en los últimos días de noviembre en pedir explicaciones a la alcaldesa por sus actuaciones. La oposición, sin embargo, está dividida: en el último pleno municipal, a Ada Colau le quitaron las castañas del fuego sus aliados del PSC, pero también ERC y JxCat evitaron que diera explicaciones sobre las oscuras subvenciones otorgadas desde del 2016. Un par de semanas antes, ERC echó otra mano a la alcaldesa y evitó que se encargara una auditoría externa de las subvenciones otorgadas a dedo desde el 2015, tal y como pedía el PP.

Los populares reclamaron, a finales de noviembre, que la alcaldesa compareciese públicamente para “dar explicaciones sobre la reapertura de la investigación por el caso de las subvenciones a dedo a las entidades afines”. Tanto la Audiencia de Barcelona como la Fiscalía han pedido en el juzgado de instrucción número 21 de Barcelona que investigue a fondo las subvenciones municipales de los comunes a entidades amigas. Este juzgado había despachado el tema archivando la querella el pasado 26 de junio, sin haber hecho diligencias que pueden ser importantes.

Según el PP, existen unas 250 entidades afines al gobierno municipal que viven de subvenciones públicas, algunas con vinculaciones directas con la propia alcaldesa y con sus concejales. «Ya en 2020, el grupo municipal del PP denunció que Colau repartió 37 millones de euros en subvenciones a dedo, una cifra que ha aumentado hasta 45 millones en este último ejercicio», explica la formación conservadora. De momento, el juez ha citado ya al interventor municipal como testigo, para que detalle sus informes alertando de posibles irregularidades.

Eva Parera, presidenta del grupo municipal de Valents, ha lamentado que Colau “se esconda y se quede muda cuando desde Valents le pedimos en el pleno municipal que suspenda aquellas subvenciones a entidades y asociaciones afines que están siendo investigadas judicialmente desde hace tiempo por valor de 3,4 millones de euros”. En el último pleno, Valents pidió la paralización de estas subvenciones “hasta que la justicia dicte sentencia sobre las supuestas irregularidades de pagos a entidades y asociaciones como Observatorio DESC, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Iniciativas Events, Ingeniería sin Fronteras (ISF) y Alianza contra la Pobreza Energética (APE)”.

Se disparan las subvenciones

“¿Qué le parecería, señora Colau, si yo fuera alcaldesa y otorgara sin concurso público 3 millones de euros a mi despacho de abogados en contratos menores? ¿Qué estarían pidiendo ustedes? Seguro que hablarían de corrupción y estarían pidiendo mi dimisión. Ustedes están tejiendo una red clientelar con estas subvenciones”, le dijo Parera a la alcaldesa. Según las cifras de Valents, Colau incrementó un 166% las subvenciones amigas desde que ocupa el cargo. La justicia investiga si esto se corresponde con la realidad y puede haber cometido los delitos de malversación, prevaricación, fraude, negociaciones prohibidas y tráfico de influencias.

Pero, ¿qué ocurre en el Ayuntamiento de Barcelona? En estos momentos, hay cinco concejales con causas abiertas: Janet Sanz, Eloi Badia, Lucía Martín y Marc Serra, al margen de la alcaldesa. Sin embargo, la querella que se investiga en el juzgado de instrucción número 21 de Barcelona también se dirige contra la concejala Laura Pérez y los exconcejales Gerardo Pisarello, Jaume Asens, Gala Pin y Laia Ortiz, además de la asesora Vanessa Valiño (pareja de Pisarello).

No hay duda de que algo apesta en el consistorio de Barcelona. Los populares sospechan que otras entidades han recibido abundantes sumas de dinero y que no están siendo investigadas, como Diomcoop o Alencoop, que se llevaron 212.000 y 356.000 euros respectivamente. La primera es una cooperativa formada por exmanteros que se dedica a servicios de logística, a la confección y venta de ropa en un taller propio y con marcas propias y servicios de catering. Por su parte, Alencoop es una cooperativa creada en 2015 para dar salida a personas que se dedicaban a buscar chatarra en la calle. En 2020, el Ayuntamiento le retiró las ayudas y la cooperativa pasó a funcionar dentro de la órbita de la empresa de inserción Andròmines.

Pero es Valents quien ha puesto el dedo en la llaga: ha añadido otra entidad a la lista de los «sospechosos habituales», la empresa Iniciatives Events, firma que encabeza un holding que está siendo investigado por el juzgado de instrucción número 1 y por la Autoridad Catalana de la Competencia (ACCO ) por manipular contratos. Iniciatives Events fue la empresa que organizó todos los actos de ERC, JxCat, la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Òmnium Cultural, los del presidente de la Generalitat… y los de Tsunami Democrático.

Los propietarios de Iniciatives Events, Toni Fusté y Roc Aguilera, fueron detenidos por el magistrado Joaquín Aguirre, titular del juzgado de instrucción número 1 de Barcelona, en octubre de 2020, en el marco de la operación Volhov. En la investigación policial, la Guardia Civil detectó una conversación de Fusté con un alto cargo municipal en la que hablaban de los métodos para eludir la ley y manipular contratos públicos. Ni Colau ni nadie del consistorio se preocupó por el tema. Es más: Iniciatives Events empezó a tener mayor presencia y protagonismo tanto en los concursos como en las adjudicaciones de contratos menores del Ayuntamiento de Barcelona.

A finales del pasado mes de enero, el Ayuntamiento prorrogó un contrato con esta compañía para gestionar la oficina de producción y logística de las actividades navideñas. Faltaba casi un año, pero el contrato se decidió en enero. Le costó al erario municipal más de 337.000 euros. Pero es que el pasado 29 de septiembre, el Ayuntamiento le dio un contrato de más de 109.000 euros para diseñar una programación de actividades relacionadas con la campaña municipal de Navidad para fomentar la compra de proximidad. Papá Noel viene cargado de regalos para esta empresa.

Janet Sanz no para

En mayo, Iniciatives Events obtuvo la organización del Día del Orgullo LGTBI por casi 184.000 euros, además de otro de 449.000 euros para organizar todos los actos el área de Ecología Urbana, que depende de la teniente de alcalde Janet Sanz. A finales de este mes de noviembre, Sanz le otorgó otro contrato de más de 48.000 euros para el mantenimiento de los equipos de audiovisuales en las salas de reuniones de su área.

En septiembre, el Icub le había concedido un contrato de 43.500 euros para montar las estructuras de las fiestas de la Mercè en los Jardines de Pla i Armengol y otro de 39.000 euros para las estructuras de los actos a celebrar en la plaza Sant Jaume con motivo también de la Mercè. En octubre constan otros dos contratos del Icub, uno por casi 6.000 euros para el alquiler de material técnico para una bienal, y otro por casi 17.000 euros para el “suministro de material en eventos culturales”. Se trata, como se ve, de una empresa habitual en las adjudicaciones municipales, donde es una firma muy apreciada en determinadas áreas.

Además, en los extractos del Ayuntamiento consta que Iniciatives Events logró dos contratos de más de 12.000 euros y de casi 6.000 euros para soporte técnico de jornadas o el suministro de material de streaming. También constan tres contratos, uno menos de 1.000 euros, por un servicio de control técnico de una sala, y otros dos de 17.908 y de 14.500 euros. Éste último fue para servicios técnicos y el otro, para la organización de los actos del 30 aniversario de los Juegos Olímpicos. Sorprendentemente, también consta otro contrato por 16.456 euros facturado a una entidad llamada Iniciatives Barcelona Sports Consulting SL por la «producción 30 años de los Juegos». En realidad, es lo mismo, puesto que esta última compañía tiene los mismos socios que Iniciatives Events. Lo que se desprende de estos documentos es que los empresarios Fusté y Aguilera cobraron por partida doble y a través de distintas empresas, por los mismos conceptos, o conceptos muy similares. Iniciatives Barcelona obtuvo el pasado mes de julio otro contrato de 17.538 euros para el “montaje y alquiler de infraestructuras y artístico”. O el Ayuntamiento lleva un desconcertante descontrol de los actos que organiza y los contratos que otorga, o aquí está gato escondido.

Esta oscura gestión económica preocupa a algunos dirigentes de los comunes. Hay sospechas fundadas de que algunas subvenciones podrían haberse evitado. No son conspiraciones de la extrema derecha, como la propia Colau dijo en el primer momento, ni es la actividad de grandes y demoníacos lobbies que quieren echarla del cargo. Cuanto más se empeña Colau en ocultar su gestión o la de su equipo, más fuerza toman las sospechas de que lo que se cuece en las ollas municipales de los comunes no es del todo limpio. Las elecciones municipales se acercan y los nervios de la alcaldesa están cada vez más a flor de piel.

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