El juzgado penal número 17 de Barcelona ha absuelto a los seis militantes de Arran acusados de un delito de desórdenes públicos por ocupar la sede del PP de la capital catalana en marzo de 2017, con el objetivo de reclamar un referéndum de autodeterminación. La sentencia, emitida por el magistrado Josep Tomàs Salàs, también descarta abrir un procedimiento contra el exdiputado de la CUP David Fernández por un presunto delito de falso testimonio.
Aunque se ha probado que los militantes de la organización de la izquierda independentista accedieron al interior de la sede del PP «permaneciendo en un vestíbulo previo a una segunda puerta, durante unos 15 minutos», el juez considera que los hechos no constituyen un delito de desórdenes públicos porque «la invasión u ocupación tiene que tener cierta permanencia en el tiempo, necesaria para llegar a impedir el desarrollo de la normal actividad de un establecimiento abierto al público». En este caso, la «corta duración» de la protesta a la sede popular hace que las acciones «no puedan ser calificadas como una invasión».
Respecto al exdiputado de la CUP, el magistrado ha descartado que haya cometido un delito de falso testimonio porque «la falsedad» de sus declaraciones «no resulta evidente», puesto que Fernández «vio los hechos desde el exterior» y sus explicaciones «se parecen a las declaraciones vertidas por el resto de testigos que estuvieron en el lugar en calidad de periodistas». La sentencia tampoco aprecia que el cupero «alterara consciente y deliberadamente la verdad al actuar como testigo».
