El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, se ha mostrado dispuesto a reformar el delito de sedición y a culminar ya la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), dos líneas de trabajo del ejecutivo que ha querido desvincular en su visita oficial a Sudáfrica, enmarcándolas, respectivamente, en la “agenda legislativa” de su ejecutivo y en el “cumplimiento de las obligaciones constitucionales”.
Sobre el delito de sedición, Sánchez no ha aclarado en qué términos se reformará, pero ha argumentado que ahora la situación en Catalunya es «mucho mejor» que hace cinco años y que el «reencuentro» que ha impulsado comporta la resolución «por vías políticas ” de una “situación inédita en los 40 años de democracia”.
Después de que algunos medios apuntaran que el PP exigía que no se reformara el delito de sedición para pactar la renovación del CGPJ, el presidente del gobierno ha asegurado que el acuerdo sobre el consejo está «preparado», y sólo pendiente de la aceptación de los populares. Sánchez no ha aclarado si el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, le ha trasladado la condición de no tocar el delito de sedición.
Fuentes del PP citadas por RTVE niegan que hayan alcanzado un acuerdo con el PSOE que pueda firmarse ya, aunque admiten que han hecho progresos.
