Stop Violències considera un éxito la manifestación de este miércoles en defensa del derecho al aborto convocada por la propia asociación en la capital andorrana, a la que han asistido cerca de cincuenta personas. En conversación con LA VALIRA, la presidenta de la entidad feminista andorrana, Vanessa M. Cortés, se ha mostrado agradecida con todos y todas quienes estuvieron presentes, y ha asegurado que no tienen «ninguna duda» de que «cada vez seremos más».
«En un país capitalista neoliberal que vive sólo para tener tiendas y hoteles abiertos con horarios esclavos e imposibles, donde la conciliación familiar es todo un mundo, que vengan entre 40 y 50 personas a una manifestación es todo un éxito porque la gente ha tenido que hacer milagros para poder estar ahí«, ha explicado Cortés. Stop Violències también ha valorado positivamente la presencia de hombres en la manifestación y ha celebrado que «las personas de bien» se impliquen en la lucha por los derechos de las mujeres, que también son derechos humanos.
Por otra parte, la presidenta de la asociación feminista y psicóloga social experta en violencias ha alertado de una excesiva presencia policial en la protesta, y ha señalado que, en cambio, en la manifestación del 1 de mayo por el Día del Trabajador no se vio a ninguno. De hecho, la manifestación de este miércoles ha estado bajo la vigilancia de dos furgones de antidisturbios y de otros agentes que rodeaban a las manifestantes mientras caminaban por las calles y, según el testimonio de los asistentes, la policía les fotografió durante todo el recorrido. «Esto es una medida de coacción», ha asegurado Cortés, quien ha destacado que Stop Violències se manifiesta desde 2017 y que «nunca ha habido ningún disturbio ni hemos roto mobiliario». «Podemos ser incómodas, pero eso no justifica tanta policía. Entendemos que lo hacen también para desconvocar a la gente», considera la presidenta de la asociación feminista.
Cortés ha aclarado que la mayoría de los manifestantes eran personas de Andorra y que no se convocó a las mujeres de Cataluña, sino que las feministas de Pallars Jussà decidieron sumarse a la protesta «porque el acoso de los fundamentalismos religiosos está, como hemos visto en Italia, muy cerca». Durante la manifestación, se han oído cánticos como «fuera rosarios de nuestros ovarios», «la virgen María también abortaría» y «viva la lucha feminista», y también ha estado presente la presidenta del Instituto de los Derechos Humanos en Andorra, Elisa Muxella, así como varios representantes sindicales.
«Aunque nos repitan, casi de forma mecánica, que una regularización del aborto haría tambalear el coprincipado, nosotras seguiremos saliendo a la calle hasta que este derecho sea una realidad. Es el coprincipado quien debe servir a sus ciudadanas, y no al contrario, como algunas corrientes políticas conservadoras quieren hacernos creer», señala Stop Violències en su manifiesto.
