La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha expresado en Instagram su indignación por que se vincule a la capital catalana con hechos violentos, después de la muerte y los actos vandálicos sucedidos durante las fiestas de la Mercè, y ha reivindicado que la mayoría de los ciudadanos «ha disfrutado de las fiestas en convivencia».
Colau, que ha agradecido el trabajo de la Guardia Urbana, se ha quejado de que “una muerte y actos vandálicos de una noche en Barcelona generen horas y horas repitiendo e instalando la idea de violencia en Barcelona, obviando que la misma semana se han producido otros seis asesinatos en Cataluña”.
«Queremos que los Mossos investiguen a fondo y se haga todo lo necesario para que no se repita, pero ¡ya basta con difamar a Barcelona!«, ha concluido su mensaje.
En la misma línea, el teniente de alcaldía responsable de seguridad, Albert Batlle, en declaraciones a Catalunya Ràdio, ha atribuido una voluntad de «afectar a la reputación de Barcelona» a algunos partidos y medios de comunicación, «como si fuera la Chicago de los años 20 o Beirut”.
Batlle, que ha opuesto los «hechos objetivos» a las «percepciones», ha destacado que el apuñalamiento mortal durante las fiestas de la Mercè tuvo lugar «en el metro, desligado de la actividad festiva en la avenida de la Reina María Cristina”.
