El pleno del Tribunal Constitucional (TC) ha tumbado este martes el acuerdo de la mesa del Parlamento que permitió, en abril del 2018, el voto delegado de Carles Puigdemont y Toni Comín< /strong> cuando eran diputados en la cámara catalana. Lo ha hecho, eso sí, sin unanimidad: los magistrados Cándido Conde-Pumpido y María Luisa Balaguer, del sector progresista, han emitido votos particulares.
El recurso contra la delegación de voto de Puigdemont y Comín, que en ese momento eran diputados de Junts y de ERC, respectivamente, lo presentó Ciutadans.
El núcleo del argumento que despliega la sentencia, de la que ha sido ponente Juan Antonio Xiol, es que los dos diputados, a través de la delegación aceptada por la mesa presidida por Roger Torrent , traspasaron el voto «sin expresar su sentido», por lo que se «rompió la personalidad» estipulada en el reglamento de la cámara.