El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) considera liquidada la condena de inhabilitación que dictó en diciembre de 2019 contra Quim Torra por un delito de desobediencia cometido cuando, como presidente de la Generalitat, se negó a retirar por primera vez simbología independentista del palacio de la plaza Sant Jaume de Barcelona en período electoral.
La sala civil y penal del TSJC ha acordado el licenciamiento definitivo de Torra después de haber constatado que ha cumplido la pena de un año y medio de inhabilitación para desempeñar cargos públicos, que le apartó de la presidencia de la Generalitat, y que ha pagado 30.000 euros de multa.
Aunque el tribunal ha comunicado este viernes que la extinción por cumplimiento de la pena, la da por cumplida con efectos desde el 3 de enero de 2022.
Torra está pendiente de otra sentencia sobre hechos similares, tras no haber asistido a su segundo juicio, en el que también afrontaba una petición de un año y ocho meses de inhabilitación y, de nuevo, una posible multa de 30.000 euros.
