El consejero catalán de Economía y Hacienda, Jaume Giró, ha pasado de ser un “fichaje estrella” e independiente, a ser el nuevo hombre fuerte de JxCat, la persona de referencia del partido dentro del gobierno catalán. Y lo es incluso delante del vicepresidente, Jordi Puigneró. La confección y la negociación de los presupuestos de la Generalitat para el 2022 han situado Giró en el centro de la atención mediática, y también le han otorgado una situación de poder y de capacidad de decisión que hasta ahora nadie de JxCat había tenido en el gobierno de Pere Aragonès.
Así, independientemente de como acaben las negociaciones políticas de las cuentas, solo el proceso para aprobarlos al ejecutivo y las conversaciones mantenidas con la CUP, los comunes y el PSC, han hecho que su figura haya ganado peso político y, sobre todo, aceptación social entre el independentismo. Hoy por hoy, de hecho, fuentes de ERC aseguran que Giró es la persona con la cual más sintonía tiene el presidente y que ningún consejero republicano ha tenido ningún problema con él. Antes al contrario, toda la bancada de ERC en el gobierno catalán habla bien del consejero de Economía, y esto hacía años que no pasaba. Este crecimiento de su figura ha hecho que Giró empiece a ser percibido dentro de JxCat como una posible alternativa a Laura Borràs y a Jordi Puigneró para liderar la marca en unas futuras elecciones catalanas.
