Los responsables del ataque informático que sufrió la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) el pasado 11 de octubre dieron un ultimátum al centro, asegurando que si hoy no contactan con ellos, publicarán los datos conseguidos. En un mensaje compartido en la deep web del ransomware PYSA, el malware que se utilizó en el ataque, los hackers han publicado una lista de entidades a las que amenaza, donde aparece precisamente la UAB.
El virus afectó a todos los ordenadores del campus universitario, paralizando las clases el primer día, y cifró más de 650.000 archivos. Para recuperarlos, los ciberatacantes reclaman a la universidad 3 millones de euros en bitcoins y, además, amenazan con difundirlos si no reciben el dinero. Sin embargo, el rector de la UAB, Javier Lafuente, ha asegurado que no pagarán nada a los hackers.
En la carta del rector a la que ha tenido acceso EL TRIANGLE, Lafuente ha insistido en que la universidad «no ha contactado con los ciberdelincuentes y no cederá a ningún chantaje», y ha afirmado que «de momento no se ha encontrado ninguna evidencia de extracción de datos corporativos sensibles«. Sin embargo, el rector es «consciente» de que las amenazas son parte de modus operandi de los hackers, ya que «su objetivo es transmitir la imagen que tienen toda nuestra información para cobrar un rescate», y ha pedido que si alguien recibe un «mensaje sospechoso» contacte «inmediatamente» con el Centro de Atención y Apoyo (CAS, por sus siglas en catalán) de la UAB.
El rector ha explicado en el escrito que siguen trabajando «en la recuperación de los sistemas» como el SIGMA Y SUMMA, «prioritarios para el funcionamiento de la universidad». También ha recordado que, durante este mes posterior al ciberataque, «se han construido los cimientos del sistema informático, se ha recuperado el entorno Microsoft 365, se han restablecido las listas de distribución y se ha implementado la aplicación Teams como sistema alternativo para la docencia».
