El Congreso de los Diputados ha rechazado este jueves las enmiendas a la totalidad de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), por lo que la cámara baja ha dado luz verde a la tramitación parlamentaria de las cuentas propuestas por el gobierno español. Habían presentado enmiendas a la totalidad los grupos parlamentarios del PP, Vox, Cs, Junts, CUP, Foro Asturias y Coalición Canaria. Pero PSOE, Podemos, ERC, PDeCAT, PNV, EH Bildu o Más País han permitido que la cámara baja los salga adelante.
De esta forma, el ejecutivo de Pedro Sánchez ha pasado la primera fase necesaria para que los presupuestos españoles sean una realidad. Su tramitación dependía de los votos de Esquerra Republicana, que los ha condicionado a una nueva ley del audiovisual que proteja al catalán.
De nuevo, el debate presupuestario ha exhibido la división de los dos partidos que mandan en Catalunya, que han aireado sus diferencias en público. La primera piedra la lanzó ayer la portavoz de Junts, Míriam Nogueras, que acusó a ERC de ofrecer un «cheque en blanco» al gobierno español por los presupuestos del Estado «a cambio de nada». La respuesta ha llegado hoy por parte del portavoz republicano, Gabriel Rufián, que ha afirmado que la formación de Nogueras lleva demasiado tiempo viviendo alejada de la realidad.
Rufián ha defendido que «forma parte de nuestra responsabilidad negociadora y parlamentaria no desperdiciar una sola oportunidad de mejorar la vida de la gente, viva donde viva». Y en este punto ha lanzado la crítica a Junts: «Quien califica de inutilidad o de «a cambio de nada», hace mucho tiempo que se sienta en un escaño, que se mueve en coche oficial y que vive en Twitter» .
