El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha anunciado que su gobierno sólo ha aprobado que lo representen en la mesa de diálogo con el gobierno de España los tres nombres propuestos por ERC: los de él mismo y los consejeros Laura Vilagrà y Roger Torrent.
En cambio, han quedado fuera, de momento, todos los representantes que ha propuesto Junts, incluido el vicepresidente Jordi Puigneró. Según ha añadido Aragonès, Puigneró ha rechazado la posibilidad de ser incluido ahora en la lista definitiva de la delegación de la Generalitat, en espera de que se acepte en bloque una propuesta de Junts.
En una comparecencia extraordinaria, este martes, Aragonès ha reclamado «responsabilidad» a Junts ante lo que considera «una oportunidad histórica», y ha reprochado una falta de lealtad a su socio de gobierno por la aparición en los medios de comunicación de los cuatro nombres propuestos, antes de que se celebrara la reunión del ejecutivo de este martes.
De los nombres planteados por la formación del expresidente catalán Carles Puigdemont, tres no son miembros del ejecutivo, aunque Aragonés había reiterado que se trataba de una mesa en la que las delegaciones las formarían exclusivamente miembros de los gobiernos de España y de la Generalitat de Cataluña, una fórmula que la Moncloa comparte.
Aragonés ha reiterado que «la puerta está abierta» para que Junts incluya más integrantes del gobierno de la Generalitat a la delegación, y se ha mostrado completamente dispuesto a que su socio de gobierno sume a cualquiera de los otros miembros del ejecutivo catalán. En este sentido, ha dicho que «no podemos esperar», pero ha aducido que quiere que todo el gobierno esté representado. Si Junts no se aviene finalmente a designar otros miembros del gobierno, Aragonès ha adelantado que asistirá al encuentro acompañado sólo por Vilagrà y Torrent.
El presidente de la Generalitat ha defendido que la delegación deben integrarla en exclusiva miembros del gobierno para «representar al país entero» y «porque da legitimidad al proceso de negociación». También ha afirmado que, de este modo, se envía un «mensaje claro» al exterior.
Según él, el hecho de que negocien los dos gobiernos es lo que «da valor» a la mesa, y el rechazo a la presencia de Jordi Sànchez, Jordi Turull y Míriam Nogueras, las figures externas al gobierno propuestas por Junts, «no es cuestión de nombres ni personas concretas».
Junts per Catalunya, por su parte, sostiene que no se hizo constar por escrito que los representantes en la mesa debían ser miembros del gobierno catalán, y argumenta que, durante la etapa de gobierno de Quim Torra, no todos los que participaron estaban en el gobierno.
