El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha anunciado este viernes que a partir del 26 de junio dejará de ser obligatorio llevar una mascarilla al aire libre, una medida que habían reclamado varias Comunitats Autónomas y que el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, había adelantado hace dos semanas que se podría aplicara a finales de este mes.
El fin de la obligatoriedad de la mascarilla, eso sí, se condiciona al mantenimiento de la distancia de un metro y medio entre personas en la calle. La medida se ha anunciado cuando se acaba de difundir la convocatoria para empezar a vacunar a las personas nacidas entre los años 1982 y 1986.
La mayoría de los países de Europa occidental ya permitían circular por la calle sin mascarilla. Las excepciones más cercanas son Italia, que prevé abandonar el uso obligatorio en julio, y Portugal.
Sánchez ha anunciado que las mascarillas dejan de ser obligatorias en exteriores durante su intervención en el acto de clausura de la reunión del Círculo de Economía. El presidente de gobierno ha concretado que el Consejo de Ministros propondrá la medida en una reunión extraordinaria que se celebrará el próximo jueves.
«Lo vamos a hacer porque estamos cumpliendo todos los hitos que nos hemos marcado frente a la pandemia. Por todo ello, este será el último fin de semana con mascarilla en exteriores», ha manifestado.
